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Avísame si está peor

Un tipo de vendaje detecta cuando hay infección

Cuando necesitamos curar una herida o una quemadura, recurrimos a taparla para que no esté expuesta a infecciones que puedan llegarnos del exterior. Sin embargo, no siempre es suficiente y muchas veces, al tener la herida tapada, no es fácil averiguar si hay infección. El riesgo de que así ocurra es, en muchas ocasiones, es mucho más grave que la propia lesión en sí.

También ocurre que no todos tenemos la preparación o experiencia de identificar una infección mediante la observación; y una vez en casa, nos arriesgamos a no tomar las medidas oportunas para tratarla.

Pues parece ser que, próximamente, esto podría tener un fácil remedio. El Grupo de Investigación de Química Biofísica en la Universidad de Bath, Reino Unido, ha desarrollado una tecnología para fabricar vendajes que permite detectar una infección.

Este vendaje, que podría parecer humano, es capaz de vigilar cómo evoluciona una herida, y en función de la misma emprender determinadas acciones. Si todo va bien, simplemente vigila y hace las funciones que todo vendaje realiza. Cuando detecta una infección, comienza a liberar un agente antimicrobiano.

Y no se quedan ahí las acciones que realiza este vendaje, si detecta que no es capaz de contener la infección por sí mismo, automáticamente cambia de color para alertar al paciente o a quienes lo atiendan.

El producto, que fue especialmente pensado para quemaduras graves en niños pequeños, supone un avance crucial en el tratamiento de este tipo de lesiones y en la prevención de daños irreparables. Está siendo probado en cinco países europeos y solo queda esperar que se autorice su uso y esté plenamente operativo.