Teresa, conociendo tu biografía hemos llegado a ver que a los 19 años perdiste la movilidad a causa de una neuropatía. Vemos que eso no te ha echado hacia atrás en la vida, como le pasa a tanta gente y has seguido adelante con positividad y esfuerzo. ¿Cómo consigues ser así?
Bueno porque siempre tengo un pensamiento muy positivo. Yo creo que tenemos que sentirnos afortunados porque seguimos viviendo. Yo por lo menos me siento muy afortunada de seguir viva, y de tener oportunidad de disfrutar de muchas cosas. Perdí a mi padre con 15 años y claro, desde los 15 hasta los 19, que es cuando me quede en silla, me di cuenta de que en la vida lo que contaba era eso, que lo único que no tenia solución era la muerte, y que quedarse mirándose el ombligo es muy egoísta. Si cuando me quedé en silla de ruedas me hubiera quedado en casa sin hacer nada, creo que habría sido muy egoísta para mí, para toda mi familia y para todo el mundo. Pienso que hay que mirar las cosas de una forma más positiva, porque la vida tiene muchas cosas que ofrecerte y solo tienes que querer cogerlas. Te lo digo de verdad, como lo pienso, es algo que lo vivo en mi día a día y también tengo momentos malos, como todo el mundo. Hoy por ejemplo voy agobiada de tiempo y no tengo tiempo ni de teñirme y voy con un montón de canas, pero eso es una tontería, lo que importa de verdad es lo que hace que la vida merezca la pena.
¿Qué consejo le podrías dar a una persona que se encuentre en tu misma situación para que mejore su vida y pueda ser igual de optimista y positiva que tú?
Que siempre hay formas de hacer las cosas. Que la cuestión es querer hacerlas. Que aunque las tengas que hacer de una forma diferente, porque tienes una discapacidad, o porque tienes una circunstancia, la que sea, siempre hay fórmulas para poder cambiar el mundo y poder poner tu granito de arena. Yo hace más de siete años me marché al Sahara por primera vez y mi problema es que allí no había cuartos de baño. Esto me hacía pensar que igual no tenía que ir, yo pensaba, "cómo voy a ir al cuarto de baño". Si yo no hubiera sido como soy, habría dicho pues no voy y punto, pero me apetecía mucho ir y bueno me reinventé y me hice una sillita especial, una silla de playa, le recorté el centro, me puse así como una túnica arriba en la cabeza y ya tenía mi baño portátil. Entonces esto es un ejemplo claro para que mi mensaje sea "todos podemos hacer todo lo que deseemos si lo deseamos de verdad".
Saliéndonos un poco del tema, estás reconocida como una de las referencias de los Juegos Paralímpicos, por ser una de las deportistas con más medallas en la historia de estos juegos. ¡Cuéntanos! ¿Qué sientes cuando subes al pódium? ¿Qué se te pasa por la cabeza cada vez que te ponen una medalla por tus logros?
Depende de cuando subo. Al principio sentía solamente alegría, es decir, alegría orgullo, etc. Ahora siento varias cosas más, siento sobre todo descanso, alivio de decir "menos mal que he ganado", porque hay mucha gente detrás que quiere que gane, yo la primera, pero esto ya se ha convertido en algo que no es solamente para mí, porque el esfuerzo no lo hago solo yo, lo hace toda mi familia y todo mi entorno, y también quiero ganar por ellos. Así que siento alegría, ilusión, un subidón de adrenalina tremendo, pero también alivio por haber conseguido el objetivo.
Normalmente cuando me ponen la medalla, al igual que otros deportistas, si tengo más competiciones por delante, casi siempre estoy pensando en la siguiente. Lo disfruto en el mismo instante, pero lo disfruto más, cuando toco pared, cuando llego, miro el marcador y veo que he ganado. Luego me marco el siguiente objetivo, no es que sea inconformista, ni mucho menos, porque por supuesto, tengo mi punto de ambiciosa, que para eso compito. Yo no valoro demasiado las medallas, no valoro demasiado el momento, hasta que no ha pasado. Creo que eso es algo que nos pasa a todas las personas en casi toda nuestra vida, que no valoramos a veces los momentos lo suficiente hasta que han pasado y dices pues mira esa sí que era buena.
El deporte es muy competitivo y hace que muchos deportistas sean negativos por no conseguir sus logros. ¿Cómo combinas tu carrera profesional como deportista con el tema de la positividad?
Muy sencillo, yo creo que cuando quieres hacer cosas, lo has intentado con toda tu alma y te esfuerzas, no vas a fracasar. Yo tengo la valentía de intentarlo. Quise ir a Londres y conseguir 6 medallas, pero también quería dos oros y solamente conseguí uno. No haberlos conseguido no es un fracaso, es que yo tuve la fuerza y la valentía durante dos años, desde que tengo al pequeñajo, de intentarlo. Di a luz, volví a entrenar, volví a la rutina del entrenamiento y del esfuerzo, me separe de mi hijo varias veces durante un montón de días para ir a una concentración, me separe para ir a competiciones, etc. Esos sacrificios me hicieron sentir muy mala madre por dejar al niño a pesar de que lo hacía también por él, de hecho lo hacía mayormente por él. El no conseguir más oros no era un fracaso sino era "yo lo he intentado con toda mi alma", y creo que eso es bueno porque ahora lo que yo le puedo transmitir a mi hijo es "tienes que luchar por las cosas, nada es fácil en esta vida y tenemos que poner mucho de nuestra parte". Además, "cuanto más te cuesta hacer las cosas y cuanto te cuesta conseguirlas mejor saben".
¿Cuáles son los aspectos clave que has aprendido en tu vida, tras esos momentos difíciles que hayas tenido?
Momentos claves de mi vida, el que te he dicho antes de cuando murió mi padre en el que aprendí "no seas egoísta tú sigues viva, vive por los dos". De alguna manera es lo que siento ahora. Cuando me quede en silla de ruedas pensé "no voy a poder ponerme de pie, pero eso no significa que no pueda caminar", con lo que aprendí sin tardar mucho, que "no hace falta que me ponga de pie para poder caminar solo que lo hago de una manera diferente". En el deporte es un aprendizaje continuo, del deporte aprendo cosas cada día. Este año por ejemplo, tuve momentos malísimos preparando Londres, momentos de mucho cansancio, y de ahí aprendí que al final tenía razón, y que efectivamente "si quieres conseguir las cosas lo puedes hacer". Creo que estos son aspectos clave de los que he aprendido. El deporte en el que si quieres conseguir las cosas lo puedes conseguir y mi padre puesto que hay cosas que no tienen solución pero incluso de esas cosas te tienes que quedar con lo único positivo, que es que tu estas aquí y puedes tener muchas oportunidades.
¿Qué mensaje le mandarías a nuestros seguidores en los tiempos que corren para que lleven mejor esta situación?
Mando un mensaje desde luego muy positivo, un mensaje de esperanza, de lucha y un mensaje de que al final se trata ya no solamente de querer las cosas, sino de organizarte para conseguirlas. Mi manera de funcionar es, me marco un objetivo, veo la realidad que tengo, valoro las opciones que hay a mi alrededor y me organizo un plan de trabajo. Mi recomendación, mi mensaje, es sobre todo mis mejores deseos, esto no va a estar así siempre, no siempre es todo malo. Y además, también tienen que pasar cosas malas para que podamos valorar mejor las cosas buenas.